"...Que florezcan 1000 flores..." - carta de Vìctor Antòn

En estos días escuchando y leyendo las declaraciones de algunos dirigentes políticos criticando las políticas, proyectos y/o decisiones del gobierno nacional y popular  entiendo aún más el por qué del 54 % de octubre pasado. Las expresiones “gorilas” que utilizan distan demasiado de la realidad que vive hoy nuestro país y la política nacional. Es una vergüenza escuchar hablar a un docente y funcionario público tan livianamente, desconociendo los trabajos que realiza un grupo de jóvenes  de forma voluntaria, que además se integran y comparten socialmente participando activamente de distintas reuniones y fiestas populares. ¿Los habrá visitado alguna vez? “Tetra y fernet” me suena a “…van por el chori y la coca…” esa expresión que nunca van a entender aquellos a los que la militancia les resulta una tarea pesada  y no una forma de vida y/o gobierno. Que importante sería que los concejales que se dedican a criticar medidas o acciones del oficialismo presenten un proyecto superador a los que se llevan adelante, mucho más cuando algunos tienen como referentes políticos a personajes que “se van volando del gobierno, dejando el país en llamas” o “vienen a Tornquist apurados para dormir la siesta” o “implementan un 0800 para el control de las expresiones de los alumnos y docentes en las escuelas” Además a los que hoy condenan a la actividad política en las escuelas,  nunca los escuchamos condenar el silencio del que fueron víctimas varios años atrás un grupo jóvenes que desde una escuela de nuestra localidad, cuando quisieron homenajear a María Cristina Garófoli, nuestra vecina desaparecida en la oscura época en la que los “controles” a la actividad política eran implementados como pretenden hacerlo ahora en determinados lugares de nuestro país. Recordemos que recién el gobierno de Gustavo Trankels tomó la valiente decisión de hacer el homenaje que la compañera María Cristina merecía. Los que tenemos una postura, definición política y proyecto que mostrar y apoyar, podemos militar y con orgullo defenderlo en cada lugar que podamos, porque somos libres, dignos y vivimos la más profunda democracia, gracias a que en el año 2003 el compañero Néstor Kirchner encendió la llama de la Juventud en la política y que en 2007 la presidenta Cristina Fernández de Kirchner llegó para cambiar la historia de nuestro país, esa brasa que dejó encendida Néstor el 27 de octubre de 2010 ya no se apagará, y ese sentimiento de democracia, justicia social y soberanía de ideas a algunos aún les molesta.

Víctor Antón 24.168.928