Polo Ecológico Chasicó: cerca de producir hongos medicinales para tratamientos oncológicos

Llegó el biodigestor que permitirá procesar los residuos de la gente. Así se obtendrá el biogas que calefaccionará el invernadero donde se producirán los hongos. El biodigestor adquirido en China por los impulsores del Polo Ecológico Chasicó, esencial para la concreción del proyecto, ya llegó al pueblo y las expectativas de que este sueño se haga realidad son cada vez más altas. Este equipo es clave para la concreción de la iniciativa en la que vienen trabajando ,desde 2017, tres habitantes del lugar: Silvana Ardito (perito clasificadora de granos), Daniel Bastán (docente y programador web) y su esposa, la ingeniera agrónoma Mariela Virgili. “Los equipos están en el galpón del municipio, todavía embalados”, comentó Bastán, con entusiasmo por los avances registrados. “También adquirimos paneles solares para contar con más energía alternativa que nos permita tener iluminación, energía para algunas bombas, motores y control del clima dentro del invernadero”, comentó. El biodigestor será utilizado, en breve, para procesar los residuos orgánicos de toda la comunidad y así conseguir el biogas necesario para calefaccionar un invernadero en el que se producirán hongos medicinales que podrán utilizarse para tratamientos oncológicos. Chasicó, pueblo de Tornquist unas pocas manzanas. El Polo reactivaría la economía local. “El biodigestor que compramos puede tiene la capacidad de procesar más del doble del material que va a producir Chasicó, que son un 80 kilos por día. Nuestro equipo puede procesar cerca de 200 kilos al día”, señaló Bastán. “En los próximos días un agrimensor delimitará todos los espacios del terreno basado en un anteproyecto del UMPRO para determinar dónde se ubicarán tanto el biodigestor como el invernadero para la producción de hongos y los paneles solares traídos de China”, comentó. Según Bastán, si todo sigue sobre rieles, tal vez a mediados de año puedan contar con las condiciones necesarias para empezar a realizar las primeras pruebas para producir biogas. También se proyecta demarcar la zona educativa prevista en el proyecto donde van a interactuar las tres instituciones educativas de Chasicó: el Jardín de Infantes 904, la Escuela Primaria Nº 24 y la Escuela Secundaria Nª 6. Estas instituciones se están capacitando en formulación de proyectos para poder estar a tono con el emprendimiento “Tenemos comunicación permanente con el intendente Sergio Bordoni y con algunos de sus colaboradores vinculados al área para programar lo que vamos a desarrollar de aquí en adelante”, dijo Bastán. Una vez delimitado el predio -se trata de 2,2 hectáreas cedidas por la comuna- habrá que reacondicionarlo y prepararlo para la obra civil, ya que el biodigestor necesitará una platea de hormigón y también habrá que avanzar en el diseño y realización de los accesos en los que se trabajará con los residuos. “Si bien es algo aún lejano, hemos realizado algunos estudios sobre la producción de biomasa para calefacción. Analizamos la materia prima disponible en la zona para ver qué podemos hacer”, dijo. “Todo esto nos ha llevado mucho esfuerzo, trabajo y dinero particular. Estamos muy entusiasmados porque vemos que alrededor del proyecto surgen cosas muy interesantes. Algunas aún no se concretan pero nos dan a pensar que vamos por el camino correcto”, expresó. “Ya empezamos a hacer lo que queríamos y a mostrar los avances a la gente, algo que nos parecía fundamental”, dijo. Quiénes participan “Si bien somos las mismas tres personas desde el comienzo las que impulsamos el proyecto recibimos aportes de varias personas. Dentro del equipo de trabajo y consulta permanente se encuentra el doctor Fabricio De Arriba Arévalo que nos asesora en la configuración de la UMPRO (unidad modular productiva), en todos sus aspectos legales y en la vinculación con Parques Industriales de la Provincia de Buenos Aires”, destacó. “En Conicet tenemos el asesoramiento inestimable del doctor magister Pablo Postemsky que permanentemente nos ayuda, impulsa y nos trae soluciones y propuestas de crecimiento y vinculación con otros proyectos como el tema hongos medicinales”, indicó. Asimismo siguen trabajando con Juan Maiolino, estudiante de Ingeniería Civil (UNS) en el diseño de las construcciones bioclimáticas que van a utilizar y algunos ajustes sobre el diseño del invernadero. "También tenemos colaboración desde la UPSO, especialmente del licenciado. Claudio Tesán quien, junto al economista Pablo Obreque (fue uno de nuestros capacitadores durante el desarrollo del Concurso en 2017), estuvieron dictando una capacitación sobre Formulación de Proyectos en la Escuela Secundaria Nº6, con el fin de que los jóvenes desarrollen su capacidad emprendedora", explicó. De hecho, Silvana Ardito está armando todo un subproyecto para continuar el proceso de utilización de energías renovables y cuidado del medio ambiente con los chiquitos que el año pasado construyeron el mini biodigestor en el Jardín de Infantes Nº 904. Las escuelas "Las instituciones educativas van a tener un espacio para que utilicen desde sus proyectos o espacios curriculares. Por estar dentro del PECH, sus actividades deberán ser acordes a los lineamientos de uso de energías renovables, cuidado del medio ambiente para lo que nos basamos en los ODS (Objetivos de Desarrollo Sostenible) de Naciones Unidas y a conceptos de Economía Circular. Tenemos contacto habitual con gente de Naciones Unidas que se han visto muy sorprendidos por nuestro proyecto", destacó Bastán. La Escuela Secundaria Nº 6 tiene un proyecto de base local mediante el cual en 2017 alumnos de 4º año diseñaron los invernaderos geodésicos y en la escuela se encuentran los materiales para construir uno grande o dos chicos en los cuales desarrollarán algún tipo de producción, de la cual obtendrán toda la información técnica y económica para poder ofrecérsela a productores/familias de Chasicó y la zona como alternativa productiva. "La Escuela Nº 6 es de orientación Administración y Gestión y gracias al impulso que le dio a esta iniciativa el director Daniel Santarcieri podemos hacer que nuestros alumnos vuelquen sus aprendizajes al mundo real  y en la comunidad", destacó. Anahí González – La Nueva.com