Gaza acumula 37 millones de toneladas de escombros con bombas sin explotar: retirarlos podría llevar 14 años

El servicio de desminado de la ONU estima que un 10% de los explosivos lanzados están sin detonar; la retirada de los restos tomará más de 14 años

El Mundo 26/04/2024
Gaza acumula 37 millones de toneladas de escombros con bombas sin explotar: retirarlos podría llevar 14 años
Gaza acumula 37 millones de toneladas de escombros con bombas sin explotar: retirarlos podría llevar 14 años

GINEBRA.- La guerra de Israel en Gaza ha creado 37 millones de toneladas de escombros, gran parte de ellos repletos de bombas sin explotar, cuya retirada podría llevar más de una década, dijo este viernes un alto funcionario del servicio de desminado de las Naciones Unidas.

Los artefactos sin estallar enterrados en los escombros complicarían todavía más esa labor titánica, señaló Pehr Lodhammar, miembro del Servicio de las Naciones Unidas de Actividades Relativas a las Minas (Unmas, por sus siglas en inglés).

Lodhammar afirmó que era imposible saber cuánta de la munición disparada seguía activa. “Sabemos que suele haber un porcentaje de fallo de al menos el 10% de la munición de servicio terrestre”, declaró en rueda de prensa.

Búsqueda entre los escombros de un edificio destruido en el campo de refugiados de Maghazi, en el centro de Gaza

“Lo que sí sabemos es que hemos estimado 37 millones de toneladas de restos, lo que supone aproximadamente 300 kilos de restos por metro cuadrado”, añadió. Y dijo que partiendo de un número hipotético de 100 camiones, se tardarían 14 años en retirar los escombros.

Lodhammar, quien ha dirigido programas de desminado en países largamente en conflicto como Irak, hizo estas declaraciones en rueda de prensa en Ginebra, durante la presentación del informe anual del Unmas.

La guerra en Gaza estalló tras la masacre perpetrada por Hamas el 7 de octubre, que dejó cerca de 1200 muertos y donde tomaron más de 240 rehenes. Varios fueron recuperados en intercambios por palestinos detenidos en Israel.

Israel respondió con una ofensiva por la que ha sido acusado de “domicidio” debido a la intensidad de su campaña de bombardeos, que redujo a ruinas amplios sectores del enclave palestino. El 65% de los edificios destruidos en Gaza eran residenciales, declaró Lodhammar.

Edificios destruidos cerca de la frontera entre Gaza e Israel

En paralelo a estos anuncios, una delegación egipcia encabezada por Abbas Kamel, máximo responsable de los servicios de inteligencia de su país, viajó a Israel para intentar reactivar las estancadas conversaciones sobre un alto el fuego y la liberación de rehenes.

Los esfuerzos egipcios por detener la guerra mediante negociaciones han ido acompañados de duras advertencias contra un asalto israelí previsto a Rafah, el único lugar de Gaza donde Israel aún no envió tropas terrestres.

La ciudad fronteriza alberga a más de la mitad de la población de Gaza, la mayoría desplazada por los combates en otros lugares, y en un momento de hambruna inminente es también el principal punto de entrada de ayuda humanitaria en la franja.

Agencias AFP y Reuters