La fiscalía reclamó además una inhabilitación de 10 años para manejar. El abogado de las víctimas solicitó una pena de cumplimiento efectivo.
Una pena de tres años de prisión en suspenso y la inhabilitación por 10 para conducir pidió la fiscalía para un hombre imputado por un trágico choque ocurrido a principios de 2017 en un tramo de la ruta 33 y que le costó la vida a dos personas.
El juicio es llevado adelante por el Juzgado en lo Correccional Nº 3, a cargo de Susana Amelia González La Riva.
El doctor Cristian Aguilar, a cargo de la UFIJ N° 1, solicitó la sanción para Miguel Araya, quien conducía la camioneta Toyota Hilux que protagonizó el siniestro en el kilómetro 16 de la carretera.
El rodado colisionó con un Fiat Uno guiado por Gustavo Medina, a quien acompañaba Andrea Biolato y su hija de 12 años. Las dos mujeres fallecieron como consecuencia de las graves heridas.
El hombre y otros dos menores que estaban en el rodado resultaron con lesiones de consideración como consecuencia del impacto.
En el incidente se vio involucrado un Toyota Etios correspondiente a la DDI local, en el que circulaban tres efectivos y dos detenidos que estaban siendo trasladados. También resultó dañado un Volkswagen Suran en el que viajaba una pareja que resultó ilesa.
Voceros judiciales indicaron que el doctor Valentín Fernández, quien representa a la familia de las víctimas fatales, reclamó una pena de 5 años de cárcel efectiva y una inhabilitación similar a la pedida por el Ministerio Público.
El fallo será dado a conocer el próximo lunes a mediodía.
Fuente La Nueva
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